Nuestra profesora de Lengua y Literatura al llegar a Tomelloso nos reunió en una pequeña entrada al aire libre para darnos algunos consejos de lo que iba a tratar la visita. Nos teníamos que fijar en los siguientes puntos: -Importancia en los espacios -La distribución de los cuadros -La importancia del arte en un pueblo
Al llegar allí nos presentamos y tuvimos un tiempo para observar todos los cuadros que había. Después nos tocó reflexionar sobre lo que habíamos visto o inventarnos una historia sobre algún cuadro. Yo elegí hacer una reflexión sobre un cuadro que me llamó la atención.
Reflexión:
Entro en un bar que no conozco, y lo primero que me llamó la atención fueron esas palabras, frases, dibujos... pintados en la pared como si fuera la pared un folio en blanco, sin limites. Después empiezo a ver paraguas colgados en el techo, sí paraguas muy bonitos que cuelgan del techo de una forma extraña, nunca había visto una cosa así. Después empiezo a mirar a mi alrededor y estoy rodeada de cuadros, pero no cuadros con forma cuadrada ni rectangulares pequeños como estoy acostumbrada a ver, eran cuadros circulares y de gran tamaño, muchos de ellos representan la forma de vida de algunas personas. Yo estaba alucinando con lo que estaba viendo y ya para finalizar veo y hablo con la pintora de los cuadro, estamos acostumbrados a ver imágenes de cuadros de artistas famosos y no a ver los cuadros en realidad con el pintor al lado. Todo era impresionante.
El mundo de la Literatura
martes, 3 de junio de 2014
lunes, 17 de marzo de 2014
Poesia surrealista
En aquellos bosques encantados vivían cuatro damas encantadas como no sabían nada de nada se pasaban esas tardes abrumadas. Un día aprendieron magia y hasta el lago lo hechizaron y una buena regañina fue caída en ellas.
Historia de violencia
Ana caminaba por la calle con paso firme y confiado, era la primera vez en mucho tiempo que estaba segura de lo que iba a hacer. Seria la primera vez que pisaría un juzgado, la primera vez que estaría frente a un juez. Ya estaba a mitad de la calle, podía ver las banderas oficiales moviéndose con el viento en el balcón del palacio. Estando en la puerta "Respiró", ignoró a todos los que la miraban y comenzó a subir los escalones anchos de la entrada. -¡Eh, eh! ¡Espera, tú!—le grito alguien por detrás, ¡Espera que tengo que hablar contigo antes de entrar ahí—repitió varias veces.
Ana no dijo nada, solo le miró a los ojos, era la primera vez que lo hacia en mucho tiempo.
–Si quitas la denuncia, te dejaré en paz, ya no te diré nada nunca más, de verdad, ¡Ve y quitala, te prometo que ya no volverás a verme.
–¿Me lo prometes? le dijo con una voz profunda.
–Te prometo que no volveré a decirte nada, ni a acercarme a ti nunca más, ni a mirarte, si me perdonas, no volverás a verme, ¡te lo juro!
–¿Me lo juras? ¿Por quien me lo juras? – los ojos le brillaban.
– Sí, te lo juro—retrocedió un paso asustado—si quitas la denuncia te juro que no te molesto más.
– ¿Tienes miedo? Pues yo no, ¡Ya no te tengo miedo! ¡Ya no te creo! ¿Cuántas veces me dijiste esto antes? ¿Cuántas veces me dijiste que ya no me molestarías más? ¿Cuántas veces antes, me acosaste, me humillaste, me perseguiste, me amenazaste, me insultaste, y me juraste que no lo volverías hacer? ¿Cuántas veces me pediste después perdón y me prometiste que me dejarías en paz? ¿Cuántas veces te perdone, pensando que tal vez tenías razón: todo es culpa mía?, ¡Soy tan tonta! ¡Cuantas veces con tu voz dulzona me creí que todo eso podía ser por que me querías!—
Estaba abrumado, jamás la había visto así. Nunca había escuchado aquella voz, ni había mirado esos ojos. Él se sintió acorralado.
–Si, si pero, ya te juro aquí mismo que esta vez es de verdad.
–¡Sí!, tienes razón, – le interrumpió– puedes estar seguro, que será la última. Solo ha habido, una paliza, pero ¡Yo! sí te juro, ¡Que es la última!
Dio media vuelta y subió los cuatro escalones de la entrada, sorprendida de sí misma, pero satisfecha. Serena, firme, y segura de que estaba haciendo lo que debía.
Unos minutos después, Ana estaba sentada en un banco de madera, a la derecha frente al juez. Un hombre serio que imponía autoridad con su bata negra. Ella estaba sentada allí sola, pero no tenía miedo. En el instante en el que comenzaron a exponer el caso, el tiempo se detuvo o corrió demasiado. Debieron de pasar horas por que cuando caminaba, de vuelta a casa recordaba todo y cada una de las palabras, y de las preguntas que se habían dicho en la aquella habitación. Las preguntas del fiscal, del abogado defensor, de las respuestas de los testigos, del llamamiento al comportamiento que le había hecho a uno de ellos, de los ojos del juez buscando los suyos y mirando a los de él , y recordaba la ultima pregunta y su respuesta :
– ¿Tiene algo que añadir a todo lo que se ha dicho en esta sala?
–No señor, yo solo quiero que me deje en paz. Que me deje vivir, y que él haga su vida y ni se acuerde de mí.
– Entonces todo queda visto para sentencia.
Ana se tumbó en la cama y cerró los ojos. Era media tarde.
Ahora tocaba olvidar. Olvidar la primera vez que la humilló en público, olvidar todos los insultos... Las veces que le había prohibido charlar con alguna amiga, o el temor por llegar sólo dos minutos tarde. Olvidar para siempre sus gritos, sus celos, sus insultos, sus amenazas…
Ahora se sentía con fuerza para volver a llevar su vida. De volver a encontrarse con sus amigos, a los que había tenido que dejar de lado.
Ya había oscurecido del todo, y Ana se sentía cada vez más satisfecha, aliviada, recompensada, libre, y más fuerte: ya no le tenía miedo, ni se lo volvería a tener jamás.
sábado, 25 de enero de 2014
¿Qué es lo bello para ti?
Para mí lo mas bello es mi madre.Esas conversaciones largas y repetitivas que no me gustan para nada, muchas veces me sirven para mirar las cosas de otra manera, que algunas veces me lo dice por mi bien, y que yo no la escucho. Me hace ver los días de otra manera, que no solo es salir o estudiar, que hay que disfrutar momentos en familia, llevar la casa... Me enseña algunas cosas que en un futuro me van a hacer falta, conmigo se cabrea mucho porque no suelo hacerle caso cuando dice hoy día de fiesta a limpiar y entra en mi habitación, me despierta y dice venga vamos o cuando tengo examen y un día antes no me pongo a estudiar cuando ella dice. Con ella me lo paso muy bien, dice muchas tonterías que no me gustan para nada y mas cuando las dice delante de la gente, me da vergüenza, pero ella lo hace mas aposta. Esa cara que pone cuando me toca a mi hacer la comida, esa cara extraña que parece que se va a enfadar y vocear y luego es lo contrario sonríe y me ayuda a mejorarlo aunque no tenga solución. Nunca le he dicho lo mucho que la quiero pero ella siempre va a ser la mejor.
martes, 3 de diciembre de 2013
Dilema moral
Dilema resuelto:
Paula y Sandra son muy amigas desde muy pequeñas. Ellas han vivido juntas momentos inolvidables, han compartido ropa, amigos... Cuando han crecido se han visto separadas por no ir a la misma clase del instituto aunque se han juntado en los recreos. Sandra se ha enamorado de un chico del instituto que no tiene muy buena pinta. Paula se va dando cuenta de que el novio de Sandra fuma porros y consume otras drogas, pero Sandra no se da cuenta porque está muy enamorada. Poco a poco se va enganchando a las drogas. ¿Debe Paula hablar con su amiga para que deje las drogas o dejarla y que haga lo que quiera con su vida
Análisis del problema:
Paula y Sandra son muy amigas y aunque se han visto separadas por la clase, se han juntado en los recreos. El tema de consumir drogas afecta a la salud y Sandra no se ha dado cuenta de que poco a poco se ha ido enganchando y no va a poder dejarlo, se va a destrozar antes.
A favor o en contra de avisar a Sandra de su problema con las drogas:
A favor de decirle que las deje:
-Salvaría la vida de su amiga en un futuro.
-No se gastaría el dinero en tonterías.
-Pueden seguir pasando momentos inolvidables sin la falta de la droga.
En contra, dejarla que haga lo que quiera con su vida:
-Se sentaría mal en un futuro, al ver a su amiga destrozándose la vida.
-Ella no correría el riesgo de engancharse.
-No se metería en problemas.
Solución:
Desde mi punto de vista, Paula tiene que hacerle ver a su amiga donde se esta metiendo. Tiene que ayudarle de una manera o de otra a dejar las drogas, porque se destrozara la vida en un futuro. Puede conseguir otro novio, porque la vida no acaba ahí, nunca puedes darte por vencido, siempre hay otras oportunidades mejores
Paula y Sandra son muy amigas desde muy pequeñas. Ellas han vivido juntas momentos inolvidables, han compartido ropa, amigos... Cuando han crecido se han visto separadas por no ir a la misma clase del instituto aunque se han juntado en los recreos. Sandra se ha enamorado de un chico del instituto que no tiene muy buena pinta. Paula se va dando cuenta de que el novio de Sandra fuma porros y consume otras drogas, pero Sandra no se da cuenta porque está muy enamorada. Poco a poco se va enganchando a las drogas. ¿Debe Paula hablar con su amiga para que deje las drogas o dejarla y que haga lo que quiera con su vida
Análisis del problema:
Paula y Sandra son muy amigas y aunque se han visto separadas por la clase, se han juntado en los recreos. El tema de consumir drogas afecta a la salud y Sandra no se ha dado cuenta de que poco a poco se ha ido enganchando y no va a poder dejarlo, se va a destrozar antes.
A favor o en contra de avisar a Sandra de su problema con las drogas:
A favor de decirle que las deje:
-Salvaría la vida de su amiga en un futuro.
-No se gastaría el dinero en tonterías.
-Pueden seguir pasando momentos inolvidables sin la falta de la droga.
En contra, dejarla que haga lo que quiera con su vida:
-Se sentaría mal en un futuro, al ver a su amiga destrozándose la vida.
-Ella no correría el riesgo de engancharse.
-No se metería en problemas.
Solución:
Desde mi punto de vista, Paula tiene que hacerle ver a su amiga donde se esta metiendo. Tiene que ayudarle de una manera o de otra a dejar las drogas, porque se destrozara la vida en un futuro. Puede conseguir otro novio, porque la vida no acaba ahí, nunca puedes darte por vencido, siempre hay otras oportunidades mejores
domingo, 24 de noviembre de 2013
Relato a partir de una foto
Elena, una chica nueva en el instituto, con pelo ni marrón oscuro ni claro, un termino medio, con ojos verdosos, morena, alta; teme estar sola en el instituto, ya que es su primer día. Ella se va fijando en todo lo que va viendo, y a la vez lo va redactando en un pequeño cuaderno que siempre lleva en la mano. Se sienta en unas escaleras que hay al lado de la cafetería y empieza a observar a todo el mundo que pasa, oler la tierra mojada del patio y escuchar los murmullos y conversaciones de la gente. Se da cuenta de una pequeña estructura de una forma rara, que hay en medio del patio. Se queda fija viendo esa estructura de metal y llega a la conclusión de que es una fuente, pero no una fuente normal que hecha agua sino una fuente rota que no sirve para nada. Empieza a hacerse preguntas como ¿que pinta esa cosa ahí si no funciona? Ella estaba acostumbrada a que en su casa vieja, todas las cosas que no funcionaran no valían para nada y había que tirarlas y al ver la estructura esa lo vio raro. Todos los días, Elena la observaba y llego un momento donde quiso ir a hablar con el director para que la quitara, porque lo único que hacia ahí era molestar. El director le dijo que a lo mejor ella no se había parado a pensar que la fuente esa como decía ella tenia un valor importante porque aunque no funcionara en un pasado funcionó.
viernes, 8 de noviembre de 2013
El que busca la verdad corre el riesgo de encontrarla
En Madrid una familia decide adoptar una niña pequeña, porque no pueden tener hijos. Al principio la niña se va adaptando bien, juega con sus muñecos, ve la tele... Va pasando el tiempo y la niña poco a poco se va dando cuenta de que no se parece en nada a sus "padres", pero ella piensa que no pasa nada por no parecerse en nada. Cuando ella va a cumplir 16 años, llega a la conclusión de que hay pasa algo, porque todas sus amigas se parecen en algo a sus padres, y ella no se parece en nada. Empieza a investigar documentos, papeles... pero no encuentra nada que le ayude a pensar que no es hija de esos padres. Para de buscar porque se rinde, no encuentra nada por ningún lado. Cuando cumplió la mayoría de edad llego una carta certificada a su casa del departamento de acogida de Madrid, pero decidió no abrirla, ella no quería saber la verdad, se había dado cuenta de que aunque no fueran sus padres de verdad, la habían cuidado y tratado como una hija verdadera.
Suscribirse a:
Entradas (Atom)